Es cada día más y más común que la gente tenga una o varias tarjetas de crédito; cada vez es más necesario de acuerdo al sistema económico en el que vivimos, tenerlas y usarlas para crear un historial crediticio que nos permita acceder a créditos para comprar satisfactores, incluso para obtener una visa para viajar al extranjero. Hemos llegado poco a poco al punto de tener plástico en forma de instrumento de crédito es necesario para existir en el sistema financiero.

© Nacho Eguiarte / NACHOrganiza

Con todo eso se hace más común que como mecanismo de venta los grandes almacenes y los mismos bancos ofrezcan un sin fin de bienes y servicios con promociones de meses sin intereses. Esta medida es un arma de doble filo, sabiendo usarla es la mejor herramienta para comprar a plazos sin descapitalizarnos planeando los pagos. Si la usas sin tener plena conciencia de como funciona puede convertirse en el inicio de tus pesadillas más violentas.
Para que no caigas en problemas por su uso, es importante que recuerdes siempre que todas tus compras te requerirán un pago mínimo, de tal modo que tienes que sumar todos los pagos mínimos de todas las compras que hayas hecho, de ese modo tendrás una cantidad a pagar de las que resulten de la promoción, más el mínimo que te requiera por compras anteriores sumados a sus intereses y comisiones. Recuerda que hay muchos bancos o tiendas departamentales que te hablan de un mínimo a pagar pero que no necesariamente cubre el mínimo real, a esa cantidad la conocen como pago con refinanciamiento, lo que provoca que la diferencia entre pago con y sin refinanciamiento se va a capital y te generará intereses para la siguiente ocasión.
Sabiendo lo anterior ya puedes darte cuenta que comprar por el hecho de comprar sin intereses y a mensualidades no siempre es tan positivo, pues si pensaste que de tus compras pagarías 100 pesos por mes, pero hicieste 8 compras similares tendrías que pagar 800 por mes más lo que tengas arrastrando de capital anterior más lo que acumules de compras por otras promociones o compras sin promoción. Cuida tu dinero y para que no arriesgues tu patrimonio primer conoce como funciona tu tarjeta de crédito antes de usarla. Puedes acercarte a los portales de los bancos, muchos de ellos tienen cursos de educación financiera gratuitos en línea o presenciales, hay que saber para decidir.